jueves, 7 de julio de 2016

PLANIFICACIÓN DEL SEGURO MÉDICO- Extractos del libro "Finanzas para papá"



El cuidado de la salud es una parte integral de la planificación financiera. La salud financiera depende de la física, por lo tanto es necesario cuidar de la segunda para tener la primera. La vieja y conocida canción lo expresa con mucha sabiduría:

“Tres cosas hay en la vida: salud, dinero y amor…”

En general no hay dinero sin salud y qué difícil es el amor sin dinero y sin salud.

¿Puede uno mismo detectar el riesgo a ciertas enfermedades?
Desde el punto de vista individual, es importante que conozcas tus debilidades físicas, anticipes posibles problemas y los enfrentes antes de que ocurran. Puedes comenzar ahora mismo a hacer una auto evaluación de tu riesgo a las dolencias más comunes como cáncer, diabetes, enfermedades del corazón, osteoporosis o derrame cerebral. La Universidad de Harvard ofrece esta facilidad, en forma gratuita, a través de su página en español


Aquí encontrarás unos sencillos tests que te permitirán tener una idea sobre tu tendencia a desarrollar estas enfermedades. Ten en cuenta que esto no reemplaza un chequeo médico
convencional.

¿En qué consiste el seguro médico?
Bajo el término de Seguro Médico o de Salud se encierra una gran variedad de pólizas que proveen protección para diferentes riesgos que pueden afectar tanto tu salud física como financiera: consultas, exámenes de laboratorio, tratamientos médicos, hospitalización, cirugía, maternidad, accidentes personales, discapacidad, servicios odontológicos, cuidados especiales, etc. La principal utilidad es la de ayudar a pagar eventuales tratamientos médicos o intervenciones quirúrgicas que de otra forma serían muy difíciles de costear. Un valor añadido importante es que te anima a mantenerte saludable. Cuando estás asegurado acudes al médico para realizarte chequeos preventivos periódicos o ante síntomas menores, por los que no irías si el dinero tuviese que salir directamente de tu bolsillo. Estas consultas pueden ayudar a detectar a tiempo condiciones de alerta tales como la tensión alta o el colesterol, o enfermedades graves, cuando aún se encuentren a nivel incipiente y pueden ser controladas.

¿Vale la pena pagar un seguro médico?

¨En un estudio de 2005, investigadores de Harvard Medical y de Harvard Law Schools llegaron a la conclusión de que casi el cincuenta por ciento de las bancarrotas personales fueron causadas por cuentas médicas y gastos relacionados con enfermedades.¨ Creo que la anterior información responde la pregunta. Hay personas que piensan que su posibilidad de enfermarse es muy remota, y que el costo de un tratamiento puede resultar menor que el dinero que tienen que pagar mes tras mes, durante muchos años, por una póliza, sin hacer uso de ésta. Posiblemente tengan razón desde el punto de vista eminentemente de costo; sin embargo hay que tomar en cuenta que, aun si el monto de tratar una enfermedad es significativamente menor de lo que se pagaría por cinco años de seguro, probablemente es una cantidad grande de la cual puede no disponerse en el momento requerido, y que además puede causar un fuerte impacto en la economía familiar; mientras que las cuotas mensuales han estado dentro del presupuesto y se han estado pagando a un ritmo conveniente para que las finanzas no sufran.

¿Cuándo debe comprarse el seguro médico?
Tan pronto como dejes de depender del seguro de tus padres (alrededor de los 25 años en la mayoría de las aseguradoras). Es conveniente hacerlo cuando aún no se tengan indicios de enfermedades que más adelante no serán asegurables. Si bien a esa edad la posibilidad de enfermarse no es alta, nadie está exento de un accidente que pueda resultar costoso y hacer un hueco en su situación financiera o en la de su familia. Por otra parte no debes esperar a sentirte enfermo o a que aparezcan síntomas para comprar el seguro, porque la compañía aseguradora podría exceptuar estas condiciones preexistentes de tu póliza (probablemente las más importantes para ti, puesto que son las que resaltan tus áreas débiles).

¿Qué criterio debe seguirse al adquirir un seguro médico?
Lo ideal sería estar protegido contra todos los riesgos relacionados con la salud. Sin embargo, como el pago de las primas generalmente depende de un presupuesto, debe darse prioridad a los problemas potenciales de salud de mayor costo, cuyas consecuencias pudieran significar un fuerte impacto financiero. En caso de necesitar reducir el costo de las pólizas es preferible hacerlo aceptando deducibles más altos. De esta forma correrás directamente con los gastos médicos básicos, pero estarás cubierto en la eventualidad de una enfermedad o accidente costosos.

¿Qué clase de seguro médico debe adquirirse durante la segunda etapa? 
Los riesgos de la salud son amplios. Afortunadamente existe protección para prácticamente todos ellos: plan general con cobertura amplia, de accidentes personales, de enfermedades
críticas, para enfermedades específicas, de emergencias y ambulancias, odontológico, etc. Como aún no has estado expuesto al mundo de los seguros médicos para decidir qué tipo de póliza elegir, debes empezar por conocer las características principales de las existentes en el
mercado. Comencemos por ahí. Básicamente existen tres tipos de seguro médico:
·         Plan médico tradicional (pago-por-servicio)
·         Plan de salud administrado (medicina prepagada)
·         Plan combinado
·          
¿Cómo funciona el Plan Tradicional?
Si te decides por el primero (pago-por-servicio), contratarás la póliza con una aseguradora y pagarás una prima mensual que te dará derecho a seleccionar el galeno de tu conveniencia. Al requerir sus servicios deberás pagarlos de tu bolsillo. Luego enviarás el reclamo a la compañía con los comprobantes que exija. Pasado un tiempo recibirás el reembolso correspondiente. Este tipo de póliza, generalmente, tiene un deducible, lo cual significa que deberás asumir una porción de los gastos. Usualmente el administrador del plan y el proveedor del servicio médico son entidades separadas.

¿Cómo funciona el Plan administrado?
Si te decides por el plan de salud administrado, generalmente firmarás el contrato con una empresa especializada en seguro médico o directamente con una organización médica. Tiene como ventaja el énfasis en la medicina preventiva. La principal desventaja es que estarás limitado a hacer uso de los servicios de un listado predeterminado de profesionales, clínicas y laboratorios. Mientras que algunas aseguradoras te permiten visitar a cualquier especialista de la lista, cuando lo creas conveniente, en otros casos deberás seleccionar a uno de los profesionales de la misma, quien actuará como médico de cabecera. Cada vez que necesites un especialista deberás consultar primero con tu médico. Él te remitirá donde crea necesario. Si requieres ver a un galeno que esté fuera de la lista deberás asumir la totalidad o parte del costo del mismo. En cuanto al pago del servicio, no tendrás que llenar formularios ni recolectar facturas. Éstas irán directamente del centro asistencial a la aseguradora. Por lo general tendrás que pagar, además de la mensualidad, un porcentaje del valor de cada consulta, exámenes de laboratorio o tratamiento. Se hace a través de cupones que comprarás en la misma entidad de seguros. El costo suele estar entre 20 - 30% del valor de una consulta normal. Esto, en cierta forma, equivale al deducible del sistema tradicional.

¿Cómo funciona el plan combinado?
Existe un tercer grupo de organizaciones, las conocidas como Organizaciones de Proveedores Específicos. Son una combinación del sistema de seguro tradicional y el sistema prepagado. Tú adquieres una cobertura prepagada, pero adicionalmente puedes también afiliarte al sistema de pago por servicio. Esta última afiliación te permitirá hacer uso de médicos y centros de salud que no estén en la lista. Dentro de las anteriores categorías existe un sinnúmero de variantes, por lo que deberás analizar cuidadosamente y hacer muchas preguntas al agente que te ofrezca la póliza, con el fin de conocer todos los aspectos del tipo de seguro que estés adquiriendo.

¿Cómo afiliarse a un grupo médico?
Usualmente el seguro médico es ofrecido por los empleadores que, además de estar afiliados a la seguridad social ofrecida por el estado, cuentan dentro de su paquete de beneficios con algún plan de salud privado, al cual podrás afiliarte. Cuando no lo provee el patrono, la búsqueda de este seguro puede ser una tarea compleja y engorrosa. Si trabajas en forma independiente, la mejor alternativa podría ser la de unirte a un grupo con el que estés relacionado y que ya tenga negociaciones con alguna aseguradora: tu asociación de profesionales, tu cámara de negocios, tu grupo de la iglesia, tu club social, etc. Si no dispones de ninguna de las anteriores alternativas tendrás que hacer la búsqueda por tu cuenta. Como probablemente no estás familiarizado con el tema, lo primero que debes hacer es estudiar un poco. Este libro es un buen comienzo para conocer cómo funcionan los seguros en términos generales, pero deberás profundizar un poco más. El segundo paso consiste en investigar en tu lugar de residencia. Cada estado, o cada país, cuenta con organizaciones parecidas en los aspectos fundamentales, pero diferentes en los detalles. El mejor lugar para comenzar la investigación es Internet. Allí encontrarás un sinnúmero de ofertas. Estúdialas en detalle, selecciona las que más se ajusten a tus necesidades y luego haz contacto con las empresas aseguradoras y elige la que te sea más conveniente. Bien sea que adquieras tu seguro a través de la empresa, tu asociación o en forma independiente, deberás revisar cuidadosamente la póliza y comprender exactamente la cobertura y las cláusulas que contiene.
 
¿Es preferible adquirir un seguro individual o uno en grupo?
En términos generales ofrece más ventajas el seguro colectivo. Las primas son más económicas y la fuerza del grupo es importante en caso de conflictos con la aseguradora. Además la administración de la póliza estará a cargo de una persona preparada para cuidar de los detalles.

¿Qué clase de seguro médico es más conveniente: el tradicional o el plan de salud administrado?

No existe una clara ventaja o desventaja de ninguno de los dos sistemas con respecto al otro. Ambos tienen características que pueden ser atractivas para unas personas y no para otras. Si para ti es un valor muy importante tener libertad de seleccionar al médico que quieras, sin restricciones, deberás limitarte al sistema tradicional. Pero, por otra parte, si te fastidia el hecho de llenar formularios y recolectar facturas cada vez que necesites hacer un reclamo, entonces tienes un conflicto. Pon las dos características en una balanza y define cuál es más importante para ti.

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